Gastroenterologo Gastro Cirujano En Tampico Dr.Marco Antonio Pacheco Sánchez

HEMORROIDES Y SU TRATAMIENTO. RECUPERE SU SALUD Y DISFRUTE UNA VIDA NORMAL

30.07.2018
Las hemorroides son venas que están en el ano y que cuando se dilatan se convierten en varicosidades (similares a las varices en las piernas), pueden molestar.


¿Qué causa las hemorroides?

Se trata de una enfermedad muy frecuente. Es muy posible que mucha gente tenga en algún momento a lo largo de su vida síntomas derivados de las hemorroides. Las causas más importantes en la aparición de hemorroides suelen ser el estreñimiento y los malos hábitos a la hora de defecar (permanecer mucho tiempo en la taza o hacer mucha presión al defecar). La herencia también influye; si sus padres o abuelos las padecieron, puede que usted tenga mayor riesgo de tener hemorroides. Durante el embarazo, es posible que las mujeres tengan un mayor riesgo de desarrollar hemorroides. Normalmente éstas desaparecen unas semanas después del parto. Estar mucho tiempo de pie, o cargar mucho peso, puede favorecer o empeorar los síntomas de las hemorroides.

¿Cuáles son los síntomas?

Las hemorroides son venas que están en el ano y que cuando se dilatan se convierten en varicosidades (similares a las varices en las piernas), pueden molestar.


Lo más común es emitir sangre roja por el ano, bien en forma de gotas en la taza o en el papel higiénico. Normalmente el sangrado es escaso. Normalmente no son dolorosas, aunque dependiendo del tipo de hemorroides o por la aparición de alguna complicación, pueden provocar dolor. En ocasiones, las hemorroides pueden descender desde el interior del ano, salir y tener dificultad para volver a su posición original. Es lo que se llama prolapso. Aparece un bulto en el ano, que se acompaña de intenso malestar y dolor. Cuando se restablece la posición normal, pueden producir picor y quemazón a nivel anal, sobre todo a la hora de defecar o limpiarse el ano.

¿Cómo se tratan? Pueden ser  tratardas con dieta y hábitos de vida saludables. Su médico decidirá si es necesaria alguna medicación adicional. Durante las crisis: Baños de agua tibia-fresca (3-4 al día), durante 10-15 minutos, podrían ayudar a aliviar los síntomas como el picor o escozor. Cremas antihemorroidales, durante un tiempo limitado (no más de 5-7 días, porque le pueden provocar más sangrado). Su médico decidirá con usted cuál es la mejor opción. Analgésicos (por ejemplo: paracetamol, etc). Su médico decidirá con usted cuál es la mejor opción, dependiendo de sus características (antecedentes personales,

CIRUGIA SIN DOLOR . LA SOLUCION A SU PROBLEMA DE  HEMORROIDES

En la defecación:

Evite reprimir el deseo de ir al baño. Evite estar demasiado tiempo en el baño y los esfuerzos al defecar. Si las hemorroides se prolapsan (se salen del ano), lo mejor es intentar devolverlas a su posición habitual haciendo una leve presión con el dedo. En los periodos de crisis hemorroidal, para la limpieza puede utilizar toallitas húmedas o hacer baños de agua tibia tras la deposición. Para prevenir que vuelvan a molestar, es necesario tener en cuenta algunos hábitos de alimentación. Es conveniente evitar el estreñimiento: Aumentar la cantidad de fibra en las comidas (frutas frescas, verduras, pan, cereales, etc). Beber líquidos regularmente. Evitar alcohol. Realizar algo de ejercicio regularmente. En ocasiones es necesario la cirugía. Hay diferentes técnicas (su médico y/o cirujano decidirá cuál es la mejor opción

Procedimientos quirúrgicos

Si otros procedimientos no dieron resultado, o si tienes hemorroides grandes, el médico puede recomendarte un procedimiento quirúrgico. La cirugía puede realizarse en la modalidad ambulatoria o tal vez necesites una estancia hospitalaria de una noche.

  • Eliminación de hemorroides. En este procedimiento, llamado hemorroidectomía, el cirujano elimina el exceso de tejido que provoca el sangrado. Pueden emplearse diversas técnicas. La cirugía puede realizarse con anestesia local, combinada con sedación, con anestesia epidural o intradural (raquídea), o con anestesia general.

    La hemorroidectomía es la forma más eficaz y completa de tratar hemorroides graves o recurrentes. Las complicaciones pueden comprender dificultad temporal para vaciar la vejiga y, como resultado, infecciones de las vías urinarias.

    La mayoría de las personas sienten algo de dolor después del procedimiento. Los medicamentos pueden aliviar el dolor. También puede ser de ayuda tomar un baño tibio.